El ASPO, las “actividades esenciales” y el derecho a la salud del Pueblo Mapuche-Tehuelche.

 De cómo las prácticas estatales perpetúan el racismo mediante la sistemática desatención a las normas jurídicas por parte del Estado argentino.

A pesar de la prolongación del decreto 287/2021 (ver aquí ) –que entre varias cuestiones prohíbe específicamente los traslados vinculados con actividades turísticas en territorio nacional argentino hasta el 6 de agosto de 2021–, la página oficial de Aeropuertos Argentina 2000 da cuenta de que tan sólo entre  y el 25 y el 27 de  julio de 2021 arribaron a Bariloche 36 vuelos, provenientes del aeroparque metropolitano Jorge Newbery, de Córdoba, Rosario, de Mendoza y del aeropuerto internacional de Ezeiza . 

Lejos de ser anecdótico, este dato revela la forma en que el Estado-Nación opera articulando intereses de sectores hegemónicos, “flexibilizando” las medidas sanitarias y de urgencia en relación con la pandemia por el virus SARS-CoV-2. 

Este accionar estatal así como su interpretación sobre lo que es o no una “actividad esencial” es algo que ha venido denunciándose en general por diferentes Pueblos indígenas y particularmente desde el Pueblo Mapuche-Tehuelche, desde que comenzaron a implementarse las medidas del gobierno conocidas como ASPO (Aislamiento Social Preventivo y Obligatorio). 

Como fue subrayado en la carta que acompaña este documento (ver aquí), los procesos de atendimiento de la salud-enfermedad con lawen requieren de movilidades diferentes por el territorio entre Chile y Argentina: por ejemplo, se necesitan de viajes o traslados de las personas especializadas en servicios terapéuticos –machi, lawuentuchefe, püñeñelchefe (parteras), gütamchefe (hueseros)– hacia las ruka (casas) de sus pacientes o hacia los espacios de atención de la medicina mapuche –como puede ser la Ruka Lawen (casa de medicina mapuche) ubicada en la Lof Millalonco Ranquehue (S.C. de Bariloche, Río Negro). En estos traslados son fundamentales los elementos ceremoniales del machi para la realización de ceremonias como kultrun, kaskawillas y sables (cuchillos), así como diferentes tipos de lawen (plantas medicinales frescas y secas, tallos, raíces, hojas) y “aguardiente” para los preparados de remedio. Asimismo, estos procesos terapéuticos con medicina mapuche requieren que las o los machi sean acompañados por dos o más personas. Las personas encargadas de acompañar al machi tienen roles fundamentales en los itinerarios de atención a la salud desde esta medicina, por un lado, se encuentran las personas con el rol de kellufe (asistentes) y por otro lado, están los zugumachife (persona especializada en comprender el mapuzugun –idioma mapuche-). En ceremonias como el machitun (ceremonia de curación) o la renovación de rewe (lugar sagrado y ceremonial), el o la machi suele entrar en “estado de trance o kuymi”. En estos momentos, es necesaria que la persona con rol de zugumachife pueda traducir las palabras que el machi emite sólo en mapuzugun. A su vez, las personas reconocidas como kellufe cumplen la función de “enfermeros” en términos de traducción a la biomedicina (medicina alopática u Occidental). En definitiva, viajar o moverse por los territorios de Wallmapu (territorio mapuche para el cual la cordillera es un puente y no un límite) es una de las condiciones prácticas para poder ser atendido con lawen. A continuación, compartimos la explicación brindada por el machi Cristóbal Tremigual Lemui:

Bueno, culturalmente pu machi digamos, los machi que existen y su küzawkey (trabajo) no lo hacen solos. Primero que nada, se necesita de un zugumachife, que vendría a ser un traductor en wigkazugun [idioma castellano, idioma de los wigka]. En el caso de que el machi entre en kuymi, en trance, que es parte de nuestra cultura, se necesita asistencia de otra persona. Tanto en el zugun por un lado, en la traducción de la palabra, se necesita a alguien que en ese momento reciba el zugun, que pueda interactuar con el espíritu del machi o de la machi. Y ese es un zugumachife, es una persona esencial que se necesita en el trabajo de los y las machi. También es necesario un kelluy, que sería un ayudante o un asistente, se diría así en castellano. Esta persona también ayuda a pasar los elementos ceremoniales que usa el machi o la machi, ya sean los instrumentos como el kultrun, kaskawillas, así también lawen o distintos tipos de plantas o hierbas que se utilicen. Una persona tiene que ayudar en eso. Es como la medicina occidental, que el médico para hacer alguna intervención o trabajo necesita de muchos o distintos asistentes, enfermeras, paramédicos y otros más.Entonces en este caso yo creo que no sería tan difícil de explicar esa parte, pero más o menos hablando desde lo cultural, eso es lo mínimo igual que se necesita para una atención solamente, porque en caso de ceremonia, se necesitan dos personas. Pero es lo mínimo que se necesita, dos personas”

Machi Cristóbal Tremigual Lemui, julio 2021)

Desde hace un tiempo el Pueblo Mapuche-Tehuelche viene dando cuenta de la relevancia que tiene el tema del lawen y de las prácticas relacionadas con él  para las personas que atienden su salud con estos tratamientos medicinales. En relación a esto, también las personas de este Pueblo reclaman por las prácticas estatales que obstaculizan o directamente impiden el ejercicio del derecho a la salud por parte de quienes recurren a la medicina ancestral mapuche (entre quienes también se encuentran personas no mapuche).

En Bariloche la demanda al Estado para que reconozca las prácticas medicinales y las autoridades ancestrales (machi, lawentuchefe y lonko) que, de formas especializadas y diferentes, ejercen la medicina y la necesidad de acceder al lawen se hizo pública cuando, en el año 2017, militantes, comunidades, familias y organizaciones mapuche-tehuelche exigieron al SENASA (Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria) la realización de un protocolo –por resolución– para el libre traspaso del lawen por las fronteras interestatales entre Argentina y Chile (Santisteban, 2019). Cabe agregar que en el año 2015, el municipio argentino de San Carlos de Bariloche se declara “Intercultural” mediante la Ordenanza 2641-CM-15 orientada a atender reclamos indígenas asociados a interculturalizar las estructuras municipales y su accionar.

Las dificultades que antes de la pandemia por el virus SARS-CoV2 y las medidas vinculadas al ASPO se relacionaban central –aunque no exclusivamente- con el tránsito de lawen entre los Estados-Nacionales chileno y argentino son la punta de iceberg del desconocimiento por parte de ambos de la complejidad de la medicina ancestral mapuche y, concomitantemente, de la legislación internacional y nacional vigente  en nuestro país respecto del derecho a la salud y cultura de los pueblos indígenas. Lo que ahora se impide no es solamente el tránsito de lawen. El Estado imposibilita el libre tránsito por los territorios y la circulación de las personas por las fronteras, interrumpiendo los tratamientos de la salud con las y los machi, en los que la  presencialidad es un tema esencial:

Bueno, en los tratamientos lo primero es el pewtun, que es como el diagnóstico en palabras wigka. Luego de ahí se ve el tratamiento que la persona va a necesitar que principalmente son tomas de lawen, que es el remedio que se prepara con hierbas, que eso no solamente es una vez, sino que eso puede durar de 4 a 6 meses, un año, de estar tomando lawen. Algunos cada 15 días o mensualmente tienen que venir a retirar la medicina y venir a hacerse controles para ver cómo va resultando, cómo va el tratamiento. Luego, dependiendo de las personas, se necesitan ceremonias que puede ser en la casa del machi o en el lugar de residencia de la persona. Eso es relativo según el tipo de kutxan, de enfermedad que se diagnostique (…)

(c.t, Cristóbal Tremigual Lemui, 2020). (Nota completa: https://gemasmemoria.com/2020/12/28/la-palabra-del-machi-cristobal-tremigual-lemun-el-lawen-es-una-medicina-viva/

Debido a los riesgos para la salud que conlleva la interrupción de los tratamientos – causados por el incumplimiento de la legislación por parte del Estado argentino- en septiembre de 2020 distintos sectores del Pueblo Mapuche Tehuelche se organizaron en un nuevo reclamo colectivo, denunciando las consecuencias que la imposición de las fronteras estatales tuvo y tiene para quienes pertenecen al pueblo mapuche tehuelche:

Cuando los estados se reparten el Wallmapu, se nos impuso un escenario fronterizo de constantes humillaciones, requisas hacia nuestras autoridades ancestrales (machi, lawentuchefe) y hacia sus pacientes que hacen cientos de kilómetros para atenderse. A mediados de marzo del corriente año, por la pandemia del corona virus  se cerraron las fronteras estatales. Nuevamente se mutila la dinámica de nuestro Pueblo,  las Pu Machi (médicas/os Mapuche) no pueden cruzar desde la Puelmapu a Gulumapu y viceversa (Argentina-Chile). Cientos de pacientes quedaron a medias con sus tratamientos. Transcurrieron los meses y, sin embargo, muchas actividades “esenciales” se protocolizaron para su apertura, entre ellas todas las prácticas de la medicina estatal.  Es acá donde los estados argentino y chileno materializan sus políticas supremacistas y racistas, nos omiten perversamente, ya que esa omisión significa la muerte de muchos pacientes que esperan el mapu lawen (medicina natural) preparado por pu Machi o pu Lawuentuchefe y la continuación de su tratamiento. (ver nota completa en: https://gemasmemoria.com/2020/09/20/el-lawen-el-derecho-a-la-medicina-mapuche-tehuelche/)

La demanda de reconocimiento de la medicina ancestral como actividad esencial debe ser practicada por el Estado, para no quedar, como hasta ahora, en un mero tecnicismo legal. Hace ya un año, el machi Cristóbal denunciaba: 

(…) No solamente los machi, sino también lawentuchefe, püñeñelchefe, las parteras que le dicen así del campo, siempre existieron porque eran una necesidad que se mantuvo. Si existen personas así que saben y que tienen mucho más conocimientos que los que se tiene en los hospitales es porque los conocimientos de los lawentuchefe o de las püñeñelchefe, por ejemplo, son conocimientos milenarios, son conocimientos de las experiencias y desde la espiritualidad. También están los gütamchefe que son los componedores de huesos que decimos, que también siempre han existido y aún existen. Entonces los estados hoy día no pueden hacer como que no existe, porque esto sí existe y ha existido desde hace muchísimos años…

(c.t, Cristóbal Tremigual Lemui, 2020) (nota completa del machi Cristóbal en : https://gemasmemoria.com/2020/12/28/la-palabra-del-machi-cristobal-tremigual-lemun-el-lawen-es-una-medicina-viva/ 

A más de un año de estos reclamos, entre apertura y cierre intermitente de fronteras para el turismo, quienes necesitan continuar o iniciar sus tratamientos con medicina mapuche no pueden ejercer su derecho a la salud, en un país que dice reconocer la preexistencia de los pueblos originarios y las prácticas culturales de los mismos.

Adjuntamos el comunicado de la comunidad Comunidad Millalonco Ranquehue y Grupo Ruka Lawen con el formulario para adherir a su solicitud:

Formulario

Nota con el comunicado de la Comunidad

Publicado por

Kaia Santisteban

Licenciada en Ciencias Antropológicas por la Universidad Nacional de Río Negro (UNRN) – Becaria doctoral por el Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (CONICET) en el Instituto de Investigaciones en Diversidad Cultural y Procesos de Cambio (IIDYPCA). Adscripta de Antropología del Control Social en la Universidad Nacional de Río Negro.